Irene Rosales lleva unas semanas muy preocupada por su marido, Kiko Rivera, después de que sufriera un ictus. Afortunadamente parece que él se está recuperando bien y que está poniendo de su parte, lo que la tranquiliza. Pero hay un problema que ahora ha salido a la luz y ha provocado su intranquilidad.
Al parecer, el DJ no ha hecho frente al pago del IBI (Impuesto de Bienes Inmuebles) de una vivienda que tiene en Madrid. Y esto, si antes no le pone remedio, va a llevar al embargo de la misma.
Irene Rosales conoce el impago de Kiko
La nuera de Isabel Pantoja está cansada de situaciones económicas que les llevan a ella y a su pareja a estar en una difícil tesitura. Y ahora se encuentran viviendo una de estas, como se ha dado a conocer en el programa Fiesta de Telecinco.
Irene ha podido ver que se ha desvelado que Rivera les ha metido en un nuevo embrollo. Supuestamente, lleva años sin pagar el IBI de un loft que tiene en San Sebastián de los Reyes.
Durante bastante tiempo ha estado recibiendo avisos y advertencias por parte de la Hacienda Pública para que abone la deuda. Hasta el momento, no ha afrontado el pago y la citada administración le ha dado estos días una última oportunidad. Si no afronta la liquidación del dinero que debe, se va a proceder a activar la orden de embargo de dicho inmueble.
Podrían, por tanto, quedarse sin ese piso, que tienen a la venta y que les ha dado más de un quebradero de cabeza. Y es que no hay que olvidar que también hubo unos inquilinos en aquel que acabaron convirtiéndose en okupas y que les dejaron la vivienda destrozada.
Como no podía ser de otra manera, la prensa ha querido conocer la opinión de Kiko sobre la situación que vive con dicha residencia. Así, se le ha preguntado en la calle al respecto y su respuesta ha sido esquiva: “La casa es preciosa”.
Lo que sí ha explicado es que, tras una revisión médica, va recuperándose del ictus. Ha confesado: “Va todo bien, poquito a poco. Estamos en ello”.
Irene Rosales es consciente de que no es el único problema
La mujer de Kiko Rivera seguro que está intranquila por el embargo que les acecha, pero también por más situaciones complicadas. Entre estas que él tiene que hacerle frente al pago de 150 000 € a Las Mellis por la demanda que interpuso contra ellas. Demanda que ha perdido de forma definitiva tras no presentarse a la última vista.
Vamos, que el matrimonio tiene que desembolsar importantes cantidades de dinero en un momento realmente complicado. Es difícil porque, primero, Irene ya no trabaja en televisión, con lo que no cuenta con ese sueldo importante. Segundo, porque el ictus ha obligado al cantante a cancelar muchos de las actuaciones que tenía previstas, lo que ha supuesto una notable pérdida económica.
Habrá que ver cómo salen a flote de todo esto, que se suma a los problemas familiares que les rodean. Nos estamos refiriendo a que el joven sigue sin hablarse con su madre y con su hermana. Sin olvidar que la madre del hijo mayor de él, Jessica Bueno, acaba de separarse y que el supuesto vástago de su tío Bernardo quiere ser reconocido como tal.
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