Tras haber anunciado su compromiso por lo alto, Esther Doña y el juez Santiago Pedraz han sorprendido con su ruptura.
Una noticia que ha dejado a todos sin palabras y que ni siquiera la propia viuda del marqués de Griñón se esperaba.
Según Pedraz, habría descubierto cosas de su prometida que le llevaban a cortar por lo sano. "Hay líneas rojas que ha traspasado. Esther ha cambiado y no es la persona de la que me enamoré. No voy a volver con ella", confesaba.
"Rompí la relación el pasado 12 de agosto. Desde entonces, absoluta distancia", anunciaba implacable sin querer entrar en más detalles.
Mientras que Esther aseguraba no entender nada de lo sucedido. "Quiero puntualizar que el día 20 de agosto recibí un mensaje en el que se me decía: 'Nuestra relación es imposible, hablamos algún día'", reconocía ante los medios.
Después de ese último mensaje, el juez optaba por ignorarla y no cogerle más el teléfono.
"Intenté ponerme en contacto con él, no lo conseguí y entonces decidí hablar con su hermano y comentarle a su hermano el mensaje que recibí", explicaba.
"Lo único que recibí es otro mensaje que me decía que cómo se me ocurría hablar con su hermano cuando él no le había contado nada a nadie", se lamentaba Doña. "Soy la primera sorprendida en la manera de actuar que está teniendo", sentenciaba molesta.
La que fuese madrastra de Tamara Falcó insiste en que todo le ha pillado por sorpresa, pero trata de mirar hacia el futuro.
"Lo que me gustaría ya es zanjar este tema", pedía. "Esta relación se ha roto, que cada uno sigamos nuestra vida, nuestro camino y, bueno, yo volviendo a mi rutina, llevando a mi perra a la peluquería y haciendo mi deporte".
"Por supuesto, pensaba que era un distanciamiento temporal que pasaría en unos días y ya, pero de verdad que no quiero seguir hablando de este tema", concluía.
Según el entorno cercano de la expareja, "aunque aún no ha trascendido el motivo final de su adiós lo que sí se sabe son las situaciones tensas que habían vivido en un verano lleno de dudas y muchos viajes a Ibiza".
De hecho, era allí mismo y en medio del mar, donde la viuda de Griñón optaba por escapar del revuelo generado.
"Doña regresó para apartarse del mundo y hasta desconectar de todos sin coger llamadas y vivir ese momento en el barco de un amigo donde ya se comenta en su entorno que ha encontrado el consuelo", sostienen.
Tanto es así, que no ha tardado en superar la ruptura en tiempo récord junto a un nuevo amor.
"Lo cierto es que la marquesa viuda estaría viviendo una nueva ilusión junto a un importante empresario industrial cuyo barco ya ha conocido en Ibiza y con quien planea nuevas escapadas".
"A pesar de lo desolada que se muestra en sus últimas declaraciones asegurando que el juez la ha dejado por un mensaje, fuentes de la pareja insisten en que antes de ese mensaje hubo una conversación", remarcan.
"Y hasta la decisión de sacar algunas de sus pertenencias del piso de Esther en Majadahonda, pero que el diálogo era imposible con ella".
De hecho, parece que Pedraz "le insistió en que hablara con la revista para que no publicara la sesión de fotos que habían protagonizado a finales de julio para anunciar su compromiso de boda".