Ana María Aldón trabaja como colaboradora en Fiesta y, conocedora de lo que es la televisión, siempre acepta los retos que le proponen. Este fin de semana le han pedido que se someta a una sesión de hipnosis y ella lo ha hecho. Lo que quizás no esperaba es que realizar esta prueba la ha llevado a regresar a su infancia y a los malos tratos que recibía de su padre.
Entre lágrimas es como ha vivido este instante que luego, finalizada la sesión, la ha llevado a volver a romperse. Y ha sido entonces cuando ha desvelado datos de ese hombre que le destrozó la vida a ella y a su familia.
Ana María Aldón revive un auténtico calvario
La ex de Ortega Cano nada más comenzar la sesión de regresión con el hipnotizador Jorge Astyaro ha recordado su dura infancia. Una etapa esta que estuvo marcada por el comportamiento violento de su padre, Manuel.
Y así ha evocado alguna de las situaciones más duras que vivió al lado de él como el maltrato que le dio en un camión. Momento este en el que ha roto a llorar al recordar que ella sangraba.
Volver a vivir instantes como este y verse a sí misma sufriendo la ha llevado a ser más clara que nunca. Ha reconocido que dicha hipnosis ha hecho que “viva aquel momento con la misma intensidad. Recuerdo hasta el olor que había”.
“He vuelto a sentir el dolor físico, los verdugones, la sangre, eran como latigazos. Y ese dolor que te escuece es el que he sentido. El dolor emocional es el que viene después”.
Acto seguido, ha explicado con detalle el episodio revivido. Ha contado que ella tenía unos 7 años y estaba taconeando en el camión de Manuel, donde él estaba transportando sacos de azufre para usar en sus viñas. Sacos que ella rompió bailando sin querer, lo que provocó que su padre reaccionara violentamente.
Ana María Aldón da más detalles de su dolorosa infancia
La diseñadora gaditana ha conseguido con la citada regresión hablar sin tapujos sobre el calvario que ella y su entorno pasaron al lado del patriarca. Así, se ha sincerado con sus compañeros de Fiesta y les ha relatado que tiene recuerdos donde ella con solo 2 años ya sufrió los castigos de aquel.
En este punto ha confesado que “desde siempre” tanto ella como sus hermanos recuerdan el maltrato de su padre hacia su madre. Eso sí, tiene claro que por ser la pequeña es la que menos episodios violentos ha vivido y la que era más protegida por ellos. Es más, ha emocionado a todos al exponer que cuando se producía una situación de agresividad en casa todos se refugiaban debajo del colchón.
A esto ha añadido: “Cada uno corría para un lado. Estos momentos pasaban un día sí, otro no y el de en medio también”.
Un tema tabú entre la familia es este que ella ha revivido con la hipnosis, aunque ha reconocido que hay con uno de sus hermanos con el que sí lo habla. Aunque mientras que este parece haberlo superado y haber pasado página, a ella le resulta imposible. Y es que Ana María ha reconocido que “me pesa, me arrastra y no consigo dejarlo atrás”.
Pero parece que con esta sesión ha dado un paso importante para olvidar la violencia que vivió en su infancia atrás. Ha reconocido que desde que se sometió a esta prueba “estoy durmiendo bien. Aunque también noto como si tuviera la batería baja, como que el corazón me va muy despacio, como si tuviera poca vida”.
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